Cada uno con su calendario

Un año, un día,
¡En un segundo!
cuánto nos cambia la vida.

Las mismas fechas
inexorables del calendario,
ponen de manifiesto en cada uno
los recuerdos...
...lo que vivimos
...lo que dijimos
...lo que pasamos.

¡Ay del añalejo!
que guarda hechos,
decisiones, palabras y momentos
... que nos hacen humanos.
Doblega las emociones, cuando hay pérdidas
y nos llena de ilusión si se avecinan cambios.

Si pudiera dar vuelta mi anuario,
sacaría unos días y agregaría otros
para reponer lo gastado.

Cada uno con su historia,
al pasar de los años,
vacía en el cada huella
... a veces triste
... a veces pleno...
lo que hemos crecido,
lo que no hemos pedido,
ni lo que no hemos soñado.