Papá

A tus ojos gastados el tiempo ha permitido,
admirar nuestro nacimiento y en tu gran corazón,
de otros dos luceros divinos.

Eres padre y padre-abuelo,
Incondicional de tus hijas, de tus nietos,
nuestros pedacitos de cielo.
Con ellos aprendiste a besarnos atesorando recuerdos.

¡Ay! si pudiera contener en la memoria
todo, todo lo que hemos vivido.
No quiero envejecer
sabiendo que un día no estarás conmigo.

Escucharte alentando mis anhelos,
Apaciguando mis angustias..
orientándome en el desvelo,
siempre es lo que más te agradezco

Te darīa mis ojos y la salud que te falte
para que vieras a tus nietos creciendo,
junto a la mamita, 
disfrutando de otros paisajes.

Decir que te amo es nada,
porque no hay palabra para describir  tu presencia,
compañerismo, humor y guía
en esta, nuestra vida.

Se derrumba mi existencia,
sin tus abrazos, sin tus caricias,
sin tu humor, sin tu siempre alegre canto,
porque es lo que me da vida.

Vida

De atares y venires, la vida se va construyendo de afectos,
mordaces reflejos de luz,
de suspiros, de sentimientos.

Somos el único ser que a consciencia y voluntad ama
y el que reflexiona a ratos frente a la desgracia.

Se nos viene el querer a gotas
y en exhalaciones de caricias
corazón se nos desborda.

Mosaicos luminosos decoran nuestro andar,
recorriendo, absorviendo hechos.

Tal memorial al fugaz sentir,
que olvidamos lo que fuimos
en ese atardecer de invierno

Presa nocturna

Palabras pequeñas, idioma alcanzado,
sombría valentía en tornado de luz,
admiré traspasando sus ojos pardos. 

En silencio,
el pensamiento resuena
y los recuerdos dulces se hacen presente.

Aromas a cariño, a caricias,
de vez en cuando
acompañan la noche de luna llena.