Ay... primavera de los recuerdos,
alejada de la tierra mía,
cómo explicarle a un buen amigo
lo que es sentir cuando germinas.
Cuando se asoma los pastos secos reverdesen,
y el aromo saca su mejor
fragancia agradeciendo el día,
los naranjos hipnotizan con sus azahares
y las aves empollan
sus crias.
El desierto más árido no queda ajeno
a semejante y sutil acontecimiento
por un día entre arenas y rocas
regala un arcoíris de flores para no ser menos.
El desierto más árido no queda ajeno
a semejante y sutil acontecimiento
por un día entre arenas y rocas
regala un arcoíris de flores para no ser menos.
El calor se asoma de a poco allá por el sur
alternando con suave brisa
matutina
las noches se ponen más frezcas
para bajar el estío del día.
En primavera el campo regala cosechas
para colmar de manjares la mesa
y un librillo de greda siempre dispuesto
esperará a que tu vengas.